Las necesidades de tu cachorro pueden variar en tiempo y cantidad según la raza, taza de crecimiento y la actividad física, pudiendo incrementar o disminuir el consumo de sustituto de leche. De ser posible, deberá permitirse al cachorro el acceso al calostro de la madre de los primeros dos días de vida para recibir todos los nutrientes del mismo. Los cachorros huérfanos se deben mantener en un ambiente cálido para que la digestión sea la adecuada.